Constantemente me preocupa cada día el interés confuso de mis anhelos (la alegría, el amor, la plenitud, el equilibrio…) y aun más los trayectos que he de recorrer para lograrlos.
Pese a eso, la quietud y la calma tocan mi puerta de vez en cuando imponiendo un stand by obligatorio, pues esos días únicamente quiero ser ninguna cosa (“NADA”) para lograr así la sumersión total entre ausencias y silencios plagados de miradas a un horizonte inexistente, convirtiéndome en un ser imperceptible que no da cabida a sus pensamientos pues sólo es: “NADA”
Y no hay mejor forma de ser "nada" que pertenecer al "todo"
Imágenes de Gregory Crewdson
Nohemi Ramírez
4 comentarios:
Siempre apatece desconectar y mirar sólo para nosotros mismos.
Escribes como los ángeles, te felicito sinceramente y eres tremendamente original, nada fácil hoy en día.
Saludos
Gracias J.Carlos, de verdad aprecio tus visitas y aún mucho más tus comentarios
Curioso este escrito, Nohemi, y mira por donde en mi blog hablé yo recientemente también de la NADA, ya lo sabes. Esas coincidencias pasan a veces por NADA.
Pues NADA, que me alegra ver que incluso el NADA y el TODO son relativos :)
Un beso.
Así es Karmen, he revisado tu blog hoy!, y me di cuenta de la relatividad por eso no aguante las ganas de dejarte un comentario ;).
Gracias por pasar por aca y dejar tu huella.
Saludos!
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